En esta particular película, donde seis actores encarnan las diversas personalidades de la vida de Bob Dylan, Cate Blanchett interpreta la onda más rockera de este cantautor con tal es la solvencia que no parece ser la actríz que usualmente es. Su personaje Jude Quinn, frágil en salud, de aires beatniks y adipto a las drogas es el retrato vivo del Bob Dylan en los años de 1965 y 1966, marcados por la polémica en el cambio de su estilo musical del folk al rock. Muestra quizá el lado más cínico, conflictivo y sarcástico de la vida de Dylan en cuanto a sus relaciones personales, sus fans y la prensa. Blanchett no se guarda nada con su actuación y logra convencer en una película que ya de por sí es genial.
Comparto un extracto de sus escenas. Que lo disfruten.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Su comentario o pedrada es bienvenida, siempre y cuando no se atrincheren en el anonimato o vayan al autobombo del SPAM. De ser así serán borrados.