Voy a referirme un poco al Spaghetti Western. Desconocida comparada a los clásicos filmados por Sergio Leone, Django (1966) es tan emblemática dentro del género como lo es Il buono, il brutto, il cattivo (1966). Respecto al contenido y el mensaje de la película, la verdad no se sabe si hay que censurar la explícita y demente violencia de muchas de sus escenas (que calaron fondo en la influencia creativa, de un cinéfilo que se convirtió en cineasta llamado Quentin Tarantino), o bien facinarse por el misticismo que rodea a Django (Franco Nero). En esta película del también italiano Sergio Corbucci.
Esta cinta parece ambientarse en una especie de pueblo fantasma. Enlodado e inóspito, poblado por un cantinero dueño de un burdel: Punto de riñas y rivalidades entre gringos confederados y mexicanos rebeldes. Un enigmático ex soldado de la Unión, llamado Django, llegará ahí. Al igual que los personajes de Clint Eastwood, éste hablará más con sus disparos que por labios. Eso cuando se trate de enfrentar a matones y bravucones de turno.
Si hay algo que distingue (y se le critica) fuertemente al Spaghetti Western es en mostrar a muchos de sus personajes de manera grotesca. En Django no es la excepción, no importa de quién se trate. A los gringos sureños se notan con un marcado racismo, alusivo al Ku Kux Klan en sus rostros deformados por cicatrices. A los mexicanos a sí mismos los retratan como salvajes e incultos, aficionados a las parrandas, los mariachis y a las mujeres. Éstas son las más despreciadas del género, igual o peor que en las películas de mafiosos. Solo Django es el único que muestra algo de respeto por las mujeres en esta cinta.
El personaje de Django inquieta y facina desde el inicio de la película, donde se le ve a él arrastrado un ataud por enlodados caminos. No se despega mucho de él. ¿Quién o qué es lo que lleva adentro? ¿Qué lo mueve a arrastrar de forma penitente ese embarrialado ataud? La venganza dentro de los Spaghetti Westerns mueve muchos de los hilos emocionales. También lo es el amor, aunque quede muy enterrado muy profundo del alma de estos hombres; salpicados por la violencia en desiertos de pólvora y arena.
Esta cinta parece ambientarse en una especie de pueblo fantasma. Enlodado e inóspito, poblado por un cantinero dueño de un burdel: Punto de riñas y rivalidades entre gringos confederados y mexicanos rebeldes. Un enigmático ex soldado de la Unión, llamado Django, llegará ahí. Al igual que los personajes de Clint Eastwood, éste hablará más con sus disparos que por labios. Eso cuando se trate de enfrentar a matones y bravucones de turno.
Si hay algo que distingue (y se le critica) fuertemente al Spaghetti Western es en mostrar a muchos de sus personajes de manera grotesca. En Django no es la excepción, no importa de quién se trate. A los gringos sureños se notan con un marcado racismo, alusivo al Ku Kux Klan en sus rostros deformados por cicatrices. A los mexicanos a sí mismos los retratan como salvajes e incultos, aficionados a las parrandas, los mariachis y a las mujeres. Éstas son las más despreciadas del género, igual o peor que en las películas de mafiosos. Solo Django es el único que muestra algo de respeto por las mujeres en esta cinta.
El personaje de Django inquieta y facina desde el inicio de la película, donde se le ve a él arrastrado un ataud por enlodados caminos. No se despega mucho de él. ¿Quién o qué es lo que lleva adentro? ¿Qué lo mueve a arrastrar de forma penitente ese embarrialado ataud? La venganza dentro de los Spaghetti Westerns mueve muchos de los hilos emocionales. También lo es el amor, aunque quede muy enterrado muy profundo del alma de estos hombres; salpicados por la violencia en desiertos de pólvora y arena.
FICHA ARTÍSTICA
Nombre: Django
Año: 1966
Director: Sergio Corbucci
Guión: Sergio y Bruno Corbucci
Actores: Franco Nero, Angel Alvarez, Eduardo Fajardo, José Bódalo y Loredana Nusciak.
Música: Luis Enriquez Bacalov
Países: Italia y España.
Idioma: italiano, inglés y español.
Duración: 90 minutos.
Gracias por su blog, estaré viniendo a encontrarme con temas del cine. ¿Sabía usted que muchas de estas películas de vaqueros italianas fueron hechas para, con las ganancias, hacer el buen cine italiano de entonces?
ResponderEliminarOtra de muchas cosas que no sabía. Para mí fue una gran sorpresa darme cuenta hace pocos años que estas películas las rodaban en su mayoría en España, en el desierto de Almería.
ResponderEliminarÉste género me fascina mucho, aunque por ocasiones es predecible. Revitalizó al western tradicional haciéndolo más pausado, desmitificador, sobrio en incluso cómico. Pero sobre todo al gran uso que se le da a la música, que como el propio guión de la película, cuenta una historia.
Para "Érase una vez en el Oeste" (1968), Sergio Leone pidió a Ennio Morricone componer primero el soundtrack antes de rodar la película.
PARA MI DJANGO ES UNA DE LAS MEJORES PELICULAS, TENGO 38 AÑOS LA VI CUANDO TENIA 10, PERO LA TRAMA ME ENVOLVIO, EN ESPECIAL POR Q DJANGO ERA UN SOLITARIO Y ERA CAPAZ DE ENFRENTAR SIN TEMOR AL MUNDO ENTERO, AL MENOS EN LA ECENA DEL BAR CUANDO MATA A TODOS LOS 6 ACOMPAÑANTES DEL CAUDILLO NO RECUERDO EL NOMBRE Y DJANGO LE PREGUNTA A MISMO Q CUANTOS HOMBRES TENIA Y ESTE RESPONDE COMO 40, DJANGO LE RESPONDE "TRAELOS A TODOS YA Q LOS VAS A NECESITAR", FUE LA ESCENA Q MAS ME IMPACTO, ESE ES EL VALOR DE UN HOMBRE CON DIGNIDAD Y Q NO LE TEME A NADA, NI A NADIE, EXCELENTE PELICULA REALMENTE, RECIEN LA CONSEGUI Y ME LA HE VUELTO A VER VARIAS VECES, PARA MI DJANGO ES UNA PELICULA DE CULTO Q INVITO A BUSCAR Y A VERLA A TODO AQUEL Q LE GUSTE EL BUEN CINE Y Q VALORE LO BUENO.
ResponderEliminarY LA CANCION ADEMAS ES MUY CHEVERE, LA CONSEGUI, HASTA LA LETRA ES INCREIBLE, NO ME CANSO DE ESCUCHARLA.
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